La ficción española cuenta la disputa por el poder de una familia que generó un imperio a través de su negocios ilegales
FUENTE: INFOBAE
Siguiendo la línea de ficciones como Arde Madrid, Vergüenza o Mira lo que has hecho, el planteo de Gigantes también viene a romper esquemas pero, aunque parezca irónico, esta ruptura se hace desde un idea recurrente y conocida: la herencia del poder en el seno de una familia.
Hace tiempo que España está exportando ficciones de buena calidad y mucha cantidad de contenidos llegan desde diferentes plataformas. Lo que fue hace unos años Velvet, luego La Casa de papel, pasando por Elite y las series mencionadas anteriormente, hablan de un fenómeno que ya dejó de ser una moda. La industria de series de este país iberoamericano ya tiene identidad y un sello que la distingue.
Madrid es el escenario de esta serie de Movistar+. Pero lejos de la idea romántica de la ciudad que tenemos, Gigantes nos muestra el lado más oscuro de la capital española: las drogas, la violencia, la corrupción. Los contrastes entre la opulencia de los más ricos y el bajo fondo generan una dicotomía que se sostiene a lo largo de las dos temporadas con las que cuenta esta producción.
Abraham Guerrero (José Coronado, actor de Vivir sin permiso) es el capo de la droga en Madrid. Tiene tres hijos varones, Daniel (Isak Férriz), Clemente (Carlos Librado) y Tomás (Daniel Grao) cada uno con su estilo y con la vida que pudieron armar luego de la muerte de su madre siendo pequeños. Abraham no fue el mejor padre del mundo pero se hizo cargo de sus hijos luego de enviudar. Los tres crecieron dentro del mundo que creó este hombre para ellos: lejos de una imagen paternal compresiva y proteccionista, este pater familias los lanzó al mundo y a sus turbios negocios.
Ellos serán los protagonistas del odio y el enfrentamiento de esta historia. La disputa por el poder de su padre, un hombre déspota e insensible pero que generó un imperio a través de su negocios de una mueblería pero con el tráfico de droga como “negocio alternativo”, es el eje de estos Gigantes.
La pregunta que se formula en Gigantes es, ¿Qué pasa cuando el dinero y el poder del manejo de un mega negocio está en juego?. Es algo que vemos en otra serie contemporánea, Sucesión, de HBO, en la que un tema tan viejo y recurrente como la herencia del reino vuelve a estar latente y se edita de una forma diferente.
Gigantes también presenta un tema interesante que es el vínculo con los gitanos. A lo largo de la serie vemos la discriminación que todavía sufren y los prejuicios con los que tienen que enfrentarse a diario. Y los personajes femeninos-a pesar de ser una serie masculina-tienen una fuerza argumental impresionante que generan giros en la trama que terminan siendo trascendentales. Un ejemplo de ellas es Sol (Yolanda Torosio), la esposa gitana de Tomás y también podríamos sumar a su hija, Carmen.
Gigantes” es una serie para los amantes de las historias familiares de mafias y enfrentamientos de bandas. En la plataforma Movistar+ se pueden encontrar las dos temporadas, de seis episodios cada una.