La compañía alemana comenzará el nuevo ciclo con dos de sus modelos más emblemáticos, el Passat y el Tiguan.
La progresiva sustitución de los motores de combustión interna por versiones 100% eléctricas va a conllevar grandes cambios en la industria de la automoción. La Comisión Europea impulsa el Pacto Verde con el objetivo de lograr la neutralidad climática a mitad de siglo. Pero antes de llegar a este punto se ha marcado una meta volante para 2035. A partir de esa fecha prohibirá la matriculación de vehículos de combustibles fósiles, lo que ha llevado a los fabricantes a trazar una hoja de ruta para que la nueva normativa no les coja con el pie cambiado.
A lo largo de los últimos meses, las principales marcas han ido anunciando la fecha a partir de la cual solo fabricarán coches eléctricos. Su estrategia pasa por potenciar en sus catálogos las versiones de cero emisiones hasta que llegue el momento que serán los únicos modelos que van a poder comercializar. Esto conllevará grandes novedades como, por ejemplo, la desaparición definitiva del cambio de marchas manual por la simple razón de que el coche eléctrico no tiene caja de cambios ni embrague.
A partir de 2030, cinco años antes de que se prohíba la venta de coches nuevos de combustión interna en Europa, Volkswagen solo comercializará modelos con cambio automático y sin pedal de embrague. La transformación se hará de manera gradual y se irá aplicando a distintas gamas de la marca empezando por la tercera generación del Tiguan.
La firma germana solo ofrecerá versiones automáticas del Passat y del Tiguan a partir de 2023, pero hasta 2030 no suprimirá el cambio manual de sus otros modelos.
El SUV de la firma alemana será el primero que pasará a ofrecerse solo con transmisión automática. Esto ocurrirá en 2023, el mismo año en que otro modelo emblemático de Volkswagen, el Passat, dejará de ofrecerse con caja de cambios manual.
Es probable que durante los siguientes años otros modelos de la compañía sigan los pasos del Tiguan y del Passat y que solo se fabriquen con cambio automático.
De hecho, la demanda de vehículos con cambio automático crece en el mercado europeo. Por poner un ejemplo, de las 5.838 unidades se vendieron en Alemania del Volkswagen Passat en 2020, solo 1.870 llevaban cambio manual. Los datos de la empresa analista Jato indican que los usuarios se decantan por las versiones de 6 velocidades (1.652 unidades) frente a las de 5 (solo 218).
Los cambios automáticos actuales son más eficientes y ya no conllevan un gasto muy elevado de combustible como antes.
El cambio de tendencia de los conductores alemanes, que es extrapolable a otros mercados europeos, responde al hecho de que los cambios automáticos han evolucionado durante los últimos años. Si tradicionalmente se les ha asociado con un consumo alto de combustible y con no permitir una conducción deportiva por su brusquedad al pasar de una velocidad a otra hoy en día ya no es así.
El cambio de tendencia de los conductores alemanes, que es extrapolable a otros mercados europeos, responde al hecho de que los cambios automáticos han evolucionado durante los últimos años.
Si tradicionalmente se les ha asociado con un consumo alto de combustible y con no permitir una conducción deportiva por su brusquedad al pasar de una velocidad a otra hoy en día ya no es así.
Fuente: lavanguardia.com