Investigadores han estado cultivando 130,000 mil plantas de cebada modificadas genéticamente, estas tienen un objetivo diferente al que es destinada normalmente: producir carne elaborada en laboratorio a partir de plantas.
La planta ha sido modificada por investigadores de ORF Genetics en Islandia, al cosechar la planta se purifica extrayendo de ella proteínas del “factor de crecimiento”. Esta se usa para cultivar carne en laboratorio con el objetivo de depender menos de los animales vivos para la alimentación humana.
ORF Genetics ha centrado sus esfuerzos en factores de crecimiento similares a los humanos para la investigación de células madre y la industria del cuidado de la piel. La superficie en la que se cultiva es de más de 2,000 metros cuadrados, los cuales crecen gracias a métodos hidropónicos de alta tecnología.
El “factor de crecimiento” se extrae de las semillas de la cebada, siendo estas importantes para el mantenimiento de las células madre.
La directora de tecnología de proteínas de ORF Genetics, Arna Runarsdottir dijo:
“La población está aumentando y tenemos que alimentar a toda la gente”
De lograrse cultivar a mayor escala, las ventajas de alimentación humana a base de plantas modificadas genéticamente para producir carne podrían lograr alimentar a todos. A medida que aumenta la población mundial, la demanda de dietas ricas en proteínas aumenta exponencialmente, mientras que las tierras agrícolas viables no.
Representando ser una opción más viable y ambientalmente amigable en comparación con la producción de carne producida de manera convencional. Los factores de crecimiento son utilizados por varias empresas que fabrican productos cárnicos cultivados en laboratorio.
Arna Runarsdottir dijo:
“No tenemos que matar a todos estos animales, solo tenemos que quitarles las células madre”
Fuente: cerebrodigital.net