Cambios en el clima, el nivel del mar e incluso la duración de los días están entre las consecuencias de que el núcleo de la Tierra gira más lento ahora.
Los investigadores de Instituto de Geofísica Teórica y Aplicada de la Universidad de Pekín, (China) no sabían que se iban a encontrar con un fenómeno así. Ni siquiera lo suponían. Es más: en lugar de buscar la velocidad con la que gira el núcleo de la Tierra, estaban indagando en la naturaleza de los terremotos.
Si bien es cierto que estaban investigando las entrañas de la Tierra, el foco no era precisamente la esfera de hierro gigantesca que descansa en el centro del planeta. Este cuerpo, a más de 5 mil kilómetros de profundidad, es tan caliente como la superficie del Sol, y se encarga de generar el campo magnético terrestre.
Sin él, por lo tanto, la vida en la Tierra como la conocemos no sería posible. Ahora, la velocidad con la que gira se ha ralentizado. Éstas son las consecuencias previsibles para biosfera terrestre.
¿El corazón de la Tierra se detuvo?
El núcleo terrestre es una esfera de 1,200 metros de diámetro que flota en un mar de hierro casi puro. Naturalmente, esta esfera rota sobre su propio eje, así como la Tierra. Por ello, los líderes del estudio —Yi Yang y Xiaodong Song— resolvieron el enigma de si al interior de nuestro planeta había otro planeta diferente, como las matrioskas rusas.
El ‘planeta’ al interior de la Tierra es responsable de generar el campo magnético que nos protege de la radiación cósmica. Alrededor de esta esfera giratoria se encuentra el manto terrestre, que la cobija por completo. Cada 900 años, aproximadamente, el núcleo da una vuelta más que el resto del planeta.
De acuerdo con las observaciones de Xiadong Song, esto se debe a que la Luna se aleja cada vez más de nosotros. Esto provoca que las mareas cambien y, así, que la rotación de la Tierra se altere también. En consecuencia, los días son cada vez más cortos —aunque no nos demos cuenta, porque la diferencia es de milésimas de segundo.
En 2009, al analizar las ondas sísmicas en las Islas Sándwich del Sur, el investigador se dio cuenta de que el núcleo de la Tierra se frenó:
“VISTO DESDE EL ESPACIO, EL NÚCLEO GIRA PRÁCTICAMENTE AL MISMO PASO QUE EL RESTO DEL PLANETA. PERO DESDE EL PUNTO DE VISTA DE LA SUPERFICIE, DONDE ESTÁN LAS ESTACIONES SÍSMICAS, EL NÚCLEO GIRA AHORA EN DIRECCIÓN CONTRARIA; HACIA EL OESTE”, EXPLICA SONG A EL PAÍS.
Parece ser que el fenómeno se repite cada 70 años, dice el especialista, ya que un fenómeno similar ocurrió en 1970. Pero, ¿qué implica esto para la vida como la conocemos en la actualidad?
¿Por qué se detuvo la rotación del núcleo terrestre?
núcleo de la Tierra
Hasta ahora, parece ser que el fenómeno surge por la dinámica gravitacional que guarda la Tierra con su único satélite natural. Sin embargo, el estudio de la Universidad de Pekín asegura que este fenómeno tendrá consecuencias globales. Con respecto a por qué se está alentando la rotación del núcleo de la Tierra, los investigadores apelan a una dinámica ampliamente estudiada desde la década de los 90:
«SE CREE QUE LA ROTACIÓN DIFERENCIAL DEL NÚCLEO INTERNO DE LA TIERRA EN RELACIÓN CON EL MANTO OCURRE BAJO LOS EFECTOS DE LA GEODINAMO EN LA DINÁMICA DEL NÚCLEO Y EL ACOPLAMIENTO GRAVITACIONAL DEL NÚCLEO Y EL MANTO».
De acuerdo con la investigación, publicada recientemente en Nature Geoscience, esta rotación se ha inferido por los cambios entre ondas sísmicas repetidas. El patrón se ha medido desde 1990, particularmente con los registros sísmicos en Alaska y los dobletes en las Islas Sándwich del Sur. Según las detecciones más recientes, los autores detectaron que el núcleo terrestre se detuvo.
Los autores atribuyen este cambio al «acoplamiento gravitacional y al intercambio de momento angular desde el núcleo y el manto hasta la superficie». Entre las consecuencias más destacables, se encuentran los siguientes fenómenos:
Los días podrían ser más cortos (sólo por unos cuantos por segundos).
Cambios en el campo magnético.
Modificaciones sutiles en el clima global.
Aun así, puede que los seres humanos y las demás especies que habitamos en la superficie terrestre no percibamos estas alteraciones. Serán mínimas, pero se apreciarán en todo el planeta.
FUENTE: NATIONAL GEOGRAPHIC