“El primer objetivo es intentar competir. Voy día a día”.
Rafael Nadal lo tiene claro: a las puertas de la gira europea de tierra batida, históricamente la parte más importante de su temporada (Montecarlo, Barcelona, Madrid, Roma y, por supuesto, Roland Garros), el campeón de 22 títulos de Grand Slam trabaja a destajo para estar listo y poder saltar a la pista con garantías.
“Por desgracia, en los últimos tiempos se me hace difícil predecir lo que va a ocurrir”, explicó Nadal la semana pasada en la entrega de premios de la Fundación Rafa Nadal. “Trabajo para intentar empezar la gira de tierra batida, ese es mi gran objetivo y para el que me estoy esforzando, pero de aquí a lo que pueda pasar, no puedo asegurar nada”, añadió Nadal, cuya intención es disputar el Rolex Monte-Carlo Masters a partir del próximo 6 de abril.
“En ningún momento he dejado de entrenar y lo estoy intentando en todo momento”, avisó Nadal, que durante la última semana mostró en sus redes sociales sus progresos entrenando sobre tierra batida en la Rafa Nadal Academy by Movistar. “Me encuentro bien, pero hasta ahora no he podido seguir el calendario que me hubiera gustado. Ojalá la situación pueda cambiar”.
Después de un 2023 en blanco, tras ser intervenido del psoas y de un viejo problema en la cadera, Nadal volvió al circuito a principios de año en Brisbane. Allí ganó dos partidos (a Dominic Thiem y Jason Kubler) antes de caer contra Jordan Thompson en cuartos de final, en un encuentro que acabaría lesionado.
Nadal sufrió un pequeño desgarro muscular en la zona que le había mantenido alejado de las pistas en 2023 (pierna izquierda) y eso le obligó a perderse el Abierto de Australia, así como posteriormente Doha, donde tenía planeado jugar esta temporada. Luego, y a pesar de viajar a California para intentar jugar el BNP Paribas Open de Indian Wells, primer ATP Masters 1000 de la temporada, Nadal tuvo que retirarse en el último momento del evento
“No quería empezar un torneo viniendo de donde vengo, sin ninguna garantía de poder encontrar los niveles que me exijo a mí mismo”, aseguró Nadal. No estaba preparado para jugar un torneo de esa magnitud”.
“Me está siendo imposible competir desde hace año y medio o dos, así que mi principal objetivo es competir”, reveló el español. “Solo quiero ir día a día y veremos hasta qué punto se puede intentar”.
Nadal, y una meta evidente: primero, ser competitivo; luego, aspirar a más.
Fuente: ATP