Estados Unidos y Japón evacuaban el miércoles a sus ciudadanos de la ciudad bajo cuarentena en China donde surgió una cepa viral desconocida que ha matado ya a 132 personas, mientras se reportaban los primeros casos en Oriente Medio y British Airways anunció la cancelación de sus vuelos a la nación asiática.

FUENTE: REUTERS

La promesa de Pekín de controlar al coronavirus “del demonio” ha ganado la confianza de la Organización Mundial de la Salud (OMS), pero la confirmación de otros 1.459 casos en China -que eleva a 5.974 los contagios en el país- intensificaba la inquietud de la comunidad internacional.

Las muertes por el virus parecido a una gripe han aumentado desde 26 a 132 en los últimos días.

Casi todos los fallecimientos se han registrado en la provincia central de Hubei, particularmente en su capital Wuhan, donde emergieron las primeras infecciones el mes pasado por un presunto contacto con un mercado de animales salvajes.

La situación es “compleja y sombría”, admitió el miércoles el presidente Xi Jinping.

En muchas ciudades de China, las calles estaban mayormente vacías y los pocos residentes que se aventuraban a salir utilizaban mascarillas. Las tiendas de Starbucks en Pekín obligaban a los clientes a tomarse la temperatura y publicaron avisos indicando que debían portar mascarillas en el interior por orden de las autoridades locales.

“Es mi primer viaje a Asia, me siento muy desafortunada”, dijo Amanda Lee, una turista brasileña de 23 años que tuvo que reducir sus días de vacaciones. “Ni siquiera pude ver los lugares a los que quería ir, como la Gran Muralla China”.

Quienes podían ser evacuados de Hubei mostraban alivio. La provincia tiene unos 60 millones de habitantes y está prácticamente bajo cuarentena. “Me preocupaba mucho quedar atrapado allá”, dijo Takeo Aoyama, quien llegó a Tokio en un vuelo privado procedente de Wuhan junto a más de 200 compatriotas.

Dos de los japoneses evacuados presentaban síntomas de neumonía pero no se había confirmado que fueran casos del coronavirus, de acuerdo a médicos.

La propagación del virus está impactando severamente a la segunda mayor economía del mundo. Las empresas están recortando sus viajes a China y las aerolíneas suspendiendo vuelos. British Airways fue uno de los grandes nombres de la industria de la aviación en tomar una decisión drástica.

Macao, conocida por su enorme industria de casinos, es prácticamente una ciudad fantasma, mientras que los centros comerciales y espacios públicos de las grandes capitales de Asia presentan escasa actividad.

Sectores desde la minería a la industria del lujo están siendo remecidos.

Un economista del gobierno dijo el miércoles que el crecimiento de China podría reducirse a 5% o a un porcentaje aun más bajo en el primer trimestre por el impacto del coronavirus, lo que posiblemente lleve a Pekín a aplicar medidas de estímulo.

Zhang Ming, economista de la entidad estatal Academia de Ciencias de China, dijo que sus previsiones se basaban en la suposición de que el brote llegará a su punto máximo a inicios o mediados de febrero y finalizará en los últimos días de marzo.

VIRUS DE LABORATORIO EN AUSTRALIA

La bolsa de Hong Kong sufrió un revés importante en su primer día de operaciones luego del receso por el Año Nuevo Lunar. Los segmentos de casinos y finanzas lideraron la caída de 2,5 del índice Hang Seng hasta mínimos de siete meses.

Aunque otras bolsas parecían sostenerse, está por verse el efecto que tendrá la reapertura de los todos los mercados chinos el 3 de febrero.

Pero en un evento que podría ser un gran avance para controlar la enfermedad, científicos en Australia dijeron que desarrollaron una versión en laboratorio del coronavirus, la primera en ser recreada fuera de China.

Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) dijeron que cerca de 210 estadounidenses estaban siendo evacuados de Wuhan. Las personas transportadas serán examinadas varias veces al llegar a California, informó el organismo en un comunicado.

Un funcionario del gobierno estadounidense dijo que 50 diplomáticos y contratistas estaban entre los pasajeros.

Australia, en tanto, dijo que algunos de sus ciudadanos saldrían de China y serían enviados a Christmas Island, en el Océano Índico, para ser sometidos a una cuarentena.

El número de contagios en China ya supera los 5.327 casos que llegó a registrar el país por el brote del Síndrome Respiratorio Agudo y Severo (SARS) en 2002-2003, el cual causó la muerte de casi 800 personas en todo el mundo.

Aunque algunos expertos creen que la nueva cepa, conocida como “2019-nCoV”, no es tan letal como el SARS, la alarma se está expandiendo por su veloz transmisión y sus características desconocidas, como cuán letal puede llegar a ser.