Virginia Occidental fue pionero en el uso de blockchains para procesos electorales. Algunas investigaciones detectaron una vulnerabilidad en el sistema.

FUENTE: CRIPTONOTICIAS

Voatz, la aplicación de votación basada en blockchain que fue recientemente declarada por los investigadores como vulnerable, ya no será utilizada en las próximas elecciones de Virginia Occidental, en Estados Unidos.

El pasado 29 de febrero, NBC News reportó que el secretario de estado de Virginia Occidental, Mac Warner, había anunciado que los votantes con discapacidad y aquellos ubicados en el extranjero no podrán votar con aplicaciones móviles durante las primarias del estado. Por tanto, tendrán que utilizar un servicio de Democracy Live, que le permite a los usuarios llenar una boleta electoral en línea y devolverla por correo.

Virginia Occidental probó la aplicación de Voatz durante las elecciones generales realizadas a mitad de 2019, e introdujo una legislación a principios de febrero que establece una opción de voto electrónico para los condados de todo el estado. En ese sentido, la NBC dijo que había visto un acuerdo entre Voatz y Virginia Occidental, en el cual se establecía que la empresa prestaría sus servicios de votación en el 2020.

Sin embargo, parece que la confianza de Virginia Occidental en la tecnología se vio afectada por los estudios realizados por el Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT) y el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) publicados a mediados de febrero. En ellos se dijo que la aplicación Voatz y los procesos internos tenían una cantidad de vulnerabilidades de seguridad que podrían permitir a los hackers a alterar la boleta electoral y revelar las identidades de los votantes.

Aun así, la Agencia de Seguridad Cibernética y de Infraestructura (CISA) del DHS determinó que Voatz no tuvo «ninguna amenaza activa»  en su red durante la operación para las elecciones realizadas en 2019. Por su parte, Voatz explicó que desde entonces se ha ocupado de las recomendaciones proporcionadas por el DHS.

Además, un auditor electoral que supervisó el desarrollo del sistema Voatz en el condado de Utah explicó anteriormente que al menos algunos de los errores que los investigadores del MIT encontraron no pueden ser explotados en la práctica.

Donald Kersey, consejero general del secretario de estado de Virginia Occidental, declaró que «si el público no lo quiere, o es escéptico hasta el punto de no confiar en los resultados, es algo que debemos tener en cuenta».