Este viernes, en Dubai, la hispano-venezolana Garbiñe Muguruza (16ª ATP) necesitó siete bolas de partido para derrotar a Elise Mertens (18ª) y así alcanzar su tercera final de la temporada y la segunda consecutiva.
Muguruza que busca su primer título desde que ganara en Monterrey en 2019, venció por 6-4 y 7-6 (7/5), para alcanzar las 17 victorias este año -récord del circuito- y esperar en la final del sábado a la checa Barbora Krejcikova (63ª), que derrotó a la suiza Jil Teichmann (54ª) en la segunda semifinal por 7-5 y 6-2.
Es importante destacar que la semana pasada, Muguruza fue finalista en Doha y antes lo fue este año en el Yarra Valley Classic. En ambos torneos perdió en el partido decisivo.
Señaló la deportista que está «muy contenta, pienso que es siempre grandioso estar en la final y tener oportunidades para lograr trofeos. Ha sido un torneo duro aquí, con muchos partidos, estoy emocionada por estar en el último mañana».
Primeramente hubo nervios por las dos partes, Mertens y Muguruza. En el segundo set fue la misma historia. Nunca parece suficiente ante una luchadora como Mertens, capaz de mantener el pulso hasta que Muguruza se situó 5-3. Mezclando golpes y alturas, Mertens salvó una primera bola de partido y se situó 4-5. después otras tres y se puso con ventaja 6-5 y finalmente Muguruza se situó 1-0 tras 52 minutos.
Relató Muguruza, de 27 años, que «necesité muchos puntos de partido para cerrarlo. Ella es muy talentosa, siempre te da una bola más. Estoy simplemente contenta de haber ganado en dos sets». (S. R. ).
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