Enzo Ferrari estuvo siempre muy orgulloso de sus coches, pero una vez reconoció a un prestigioso piloto cuál era el mejor de sus deportivos. ¿Quieres saber cuál es?
¿Cuál era el mejor Ferrari para el propio Enzo Ferrari, el ‘padre’ de la marca? Algunos dirán que el 250 GTO, cuyas unidades han llegado a venderse en subasta por 60 millones de euros. Otros, que el 288 GTO o su gran evolución, el F40. Podríamos especular también con que fuera el 250 Testarossa, o quizá el 250 ‘Tour de France’…
Lo normal es que el padre de tantos coches, o de tantas ‘criaturas’, no haga diferencias entre ellas y ame por igual a todos sus ‘hijos’. Por eso llama la atención que un día reconociera a uno de sus coches como el mejor construido, lo que viene a decir que para él era el mejor Ferrari sin discusión.
No lo publicó a los cuatro vientos, sino que lo dijo en una conversación entre dos personas: él y Carrol Shelby. Vamos a conocer antes que nada a estos dos hombres:
A Enzo Ferrari (1898- 1988) no hace falta casi presentarlo; fue un italiano nacido en Módena que quiso ser periodista o cantante de ópera. Por suerte ninguna de estas dos posibilidades fructificó, así que su pasión fue derivando hacia el automovilismo, que practicó como piloto de cierto éxito a los mandos de Fiat y Alfa Romeo. Tuvo un primer hijo que murió de forma prematura (y cuya tumba Enzo visitaba cada mañana antes de ir a trabajar), y en 1947 desarrolló su primer coche, el 125, un bólido cuya primera carrera iría a ver. Pero se le rompió la bomba de la gasolina y Enzo decidió que nunca más iría a una carrera en la que participara alguno de sus coches.
De Carrol Shelby (1923-2012), sin embargo, no todo el mundo ha oído hablar. Fue un texano que se estrenó como piloto de Fórmula 1 en 1958 y estuvo en el Gran Circo hasta el final de la temporada 1959, obteniendo un cuarto puesto como mejor resultado. Al igual que Ferrari, acabó convirtiéndose en constructor, en este caso un pelín tramposo: en 1960, la FIA exigió que de los coches de las carreras de resistencia se fabricaran al menos 100 unidades de calle, y para llegar a esta cifra dio números de chasis que no había fabricado, y que sin embargo quiso construir ya en la década de los 90 para ‘hacer caja’.
Injustamente eclipsado
Las trayectorias de Enzo Ferrari y Carrol Shelby se juntaron en 1956, cuando el italiano conoció al ex granjero de pollos americano y quedó fascinado de su rapidez. Y ese mismo año puso en sus manos un coche de carreras muy especial: se trataba del Ferrari 410 Sport. ¿Te suena? Seguro que no. Y si Enzo Ferrari supiera cómo este bólido ha sido eclipsado por otros Ferrari quizá se llevaría las manos a la cabeza.
El 410 Sport contaba con un chasis tubular completamente nuevo, una distancia entre ejes más corta de lo habitual y un motor V12 (con doble bujía por cilindro y tres carburadores dobles) de 4.961 c.c., el más grande hasta entonces construido en Maranello. Fue un modelo muy especial, el orgullo de Enzo Ferrari.
El 410 Sport entregaba 400 CV y solo se construyeron dos unidades, con chasis 0596 CM y 0598 CM (ese último es el que ves en las imágenes). Las letras CM significaban «Carrera Messicana», porque era para ganar esta prueba para lo que se habían diseñado, pero la tragedia de Le Mans de 1955, en la que murieron 83 espectadores, canceló aquella prueba y hubo que buscarles un nuevo destino.
Así, en 1956 Shelby se puso a los mandos del 0598 CM por primera vez en Washington, donde vio la bandera a cuadros en primera posición. Después de aquella victoria vendrían otras, hasta el punto de que Shelby le confesaría a un periodista por aquella época que «nada puede competir contra este Ferrari». Años más tarde añadiría: «fue el mejor Ferrari que conduje en toda mi vida». Y esta declaración iba en la línea de las palabras que le había dicho el propio Ferrari personalmente y que siempre recordaría: «El Sr. Ferrari me dijo que éste era el mejor Ferrari que había construido». De hecho estas palabras calaron tanto en el piloto americano, que él mismo las escribió en el depósito de gasolina del coche.
Fangio también lo condujo
El 0598 CM fue el coche con el que más triunfó Carrol Shelby como piloto, ya que sumó 8 victorias y 10 podios en distintas carreras. Pero también estuvo a los mandos de Juan Manuel Fangio, Phil Hill, Castellotti y muchos más, acumulando un palmarés total de 11 victorias y 19 podios en 40 carreras celebradas entre 1956 y 1958.
El bólido, por cierto, mantiene los números originales de chasis y motor, y los multimillonarios coleccionistas deben estar salivando para cuando se celebre su subasta, que se espera para el próximo 18-20 de agosto en Monterey (California, Estados Unidos). ¿Cuánto van a pagar por ella? Mejor no hacemos apuestas porque seguro que nos quedamos cortos.
Fuente: marca.com