Preciosas palabras del serbio sobre la presencia de su hija ayer, además de hablar sobre cómo encontrar el equilibrio entre humildad y éxito.

Novak Djokovic se despertó esta mañana con 24 Grand Slams por vez primera. Su gesta en Flushing Meadows ha sido loada en todo el mundo, siendo el punto culminante de una temporada sensacional en la que nadie ha podido toserle en los mejores torneos del mundo. El secreto de su éxito y de encontrar el equilibrio lo explicó en su última aparición pública.

¿Qué se siente en el momento exacto en el que se proclama campeón, una vez más, del US Open?

«Pienso que Dios es grande. Sentí un alivio inmenso e infinidad de gratitud por ese momento. La gente me pregunta por qué no celebré justo después del último punto, después de ver que su derecha se iba a la red: simplemente sentí un alivio inmenso y estaba agradecido porque hubiese terminado (risas). Lo primero que quise hacer, justo después de intercambiar palabras con Daniil en la red, era abrazar a mi hija. Ella me inspiró para poder ganar: es mi ángel de la guarda, mi niña, mi inspiración. No sabía que iba a estar sentada en el lugar en el que estuvo durante la final, quedaba justo enfrente mía una vez me sentaba en cada intercambio, y cada vez que necesitaba algún tipo de ánimo o apoyo ella estaba ahí, mirándome, animándome, sonriendo… eso me ganaba por completo, sobre todo estando en una situación de tanto estrés, con momentos de altísima tensión, especialmente en el segundo set. Necesitaba algo, y la veía a ella y canalizaba esa energía divina hacia mí. Eso fue lo que sentí», declaró Novak Djokovic a la CBS la mañana posterior a su título en el US Open 2023.

Su estado físico durante la final, especialmente en momentos del segundo set: ¿estaba tan cansado físicamente?

«Lo estaba, lo estaba. Sinceramente, fue uno de los sets más largos que he jugado en toda mi vida; probablemente ha sido el más duro a nivel físico de todos. Fue seguramente la clave del partido, ya que de estar dos sets arriba a estar un set iguales hay una diferencia muy significativa. Recuerdo que tuvimos numerosos intercambios de más de 30 golpes, estábamos tratando de ‘quitarnos las piernas’ el uno al otro, podría haber ganado cualquiera. Ganar ese segundo set fue un alivio tremendo y seguramente la clave para el resultado final».

El apoyo de la grada durante la final

«Sentí el apoyo del público, sí. El ambiente fue impresionante, muy eléctrico. Es el estadio más grande en nuestro deporte, la Arthur Ashe, con más de 20,000 espectadores, completamente lleno. Fue un honor y un placer formar parte de ello… todavía juego al tenis por momentos como este. Cada día me motivo, me llevo al límite y me levanto a hacer mis rutinas porque si quieres llegar a un nivel capaz de alcanzar finales de Grand Slam y pelear por los trofeos más grandes del mundo, debes trabajar al máximo y hacer sacrificios. Estar ahí me hizo darme cuenta de por qué trabajo cada día para esto, así que no darlo todo no era una opción. Fue una experiencia increíble».

¿Cómo lidiar con el éxito y seguir siendo humilde y, a la vez, seguir hambriento y buscar aún más gloria?

«Marcarte objetivos es muy importante para todo. Creo que uno de los motivos por los que los deportistas pueden identificarse con la gente es porque somos capaces de atravesar los peores momentos posibles y, a la vez, los mejores momentos posibles en un periodo de tiempo muy corto, incluso en un partido. Este espectro de emociones tan amplio que puedes llegar a experimentar, a la vez que te enfrentas a la adversidad y superas los desafíos que se te presentan, es algo con lo que la gente se identifica mucho. Es muy importante tener claridad con respecto a lo que quieres en la vida, además de entender muy bien quién eres. Todos somos diferentes, todos tenemos nuestras fórmulas individuales que funcionan».

Su homenaje a Kobe Bryant

«Kobe fue uno de esos deportistas que ha dejado un legado increíble no solo dentro de la pista, especialmente fuera de ella. Fue una de las personas más importantes para mí cuando lo estuve pasando mal, cuando trataba de recuperarme de una lesión importante. Me daba consejos, me ayudaba, siempre estuvo para mí. Fue increíble. El 24 fue su número y, por tanto, siento que es un homenaje perfecto que podía hacerle».

Fuente: ATP