En la ceremonia de premiación, Djokovic definió su hito como “la corona de la temporada”. “Acabar el año como número uno del mundo creo que es el sueño de todo tenista. Es una de las cosas más difíciles de conseguir en nuestro deporte»

El tenista serbio Novak Djokovic fue reconocido este lunes por acabar la temporada 2023 como número uno del ranking mundial de la ATP, logro que conquista por octava vez en su carrera y que considera «una de las cosas más difíciles en el tenis».
El presidente de la ATP, Andrea Gaudenzi, fue el encargado de entregarle el trofeo al ganador este año en el Abierto de Australia, Roland Garros y el Abierto de los Estados Unidos durante las Finales de la ATP que se están celebrando en Turín (Itali) y donde este domingo se aseguró finalizar en lo más alto de la clasificación con su victoria ante el danés Holger Rune.

«Obviamente, es la coronación de la temporada el acabar el año como número uno del mundo. Creo que es el sueño de cualquier jugador de tenis y una de las cosas más difíciles en nuestro deporte. Obviamente, ganar un Grand Slam y ser número uno del mundo son la cúspide de este deporte»», señaló Djokovic en declaraciones en la web de la ATP.
En las pantallas gigantes de la vanguardista instalación olímpica de la ciudad italiana se proyectó un vídeo que repasaba la fantástica temporada del serbio, ganador de tres Grand Slams (Australia, Roland Garros y US Open), dos Masters 1.000 (Cincinnati y París) y un ATP 250 (Adelaida 1), además de haber disputado y perdido contra Alcaraz la final de Wimbledon. Todo con unos números espectaculares.
Necesitaba ganar un partido en las ATP Finals para obtener de nuevo un logro que le motiva muchísimo y lo consiguió a la primera oportunidad, el domingo contra Holger Rune. Después valoró su éxito: “Es fantástico. Significa mucho para mí.
No quería que se prolongase y se complicase este objetivo. A comienzos de año no le daba tanta prioridad, solo pensaba en ganar más Grand Slams. Cualquier cosa que pase ahora en el torneo será un bonus para mí”. La tensión y el deseo le pasaron factura ante Rune, sufrió y lo pagó rompiendo dos raquetas. “No animaría a nadie a hacer eso. No estoy feliz con ello.
No me gusta lo que hice, pero lo he hecho y tengo que asumir la responsabilidad. Hay otras formas más inteligentes de dejar atrás la frustración”, admitió.

En la ceremonia de premiación, Djokovic definió su hito como “la corona de la temporada”. “Acabar el año como número uno del mundo creo que es el sueño de todo tenista. Es una de las cosas más difíciles de conseguir en nuestro deporte. Eso y ganar Grand Slams es el pináculo. Ha sido un curso muy largo para todos. Poder estar aquí ahora es una bendición”, dijo el balcánico antes de dar las gracias a su equipo. “Es un esfuerzo colectivo para un éxito tremendo y un logro del que estoy muy orgulloso”.

Djokovic ya tenía el récord de años terminados en lo más alto del ranking, que amplía por delante de Sampras (6) y un trío de ases que lo consiguieron en cinco ocasiones: Connors, Federer y Nadal. Mantenerse en el trono hasta 2024 le reporta a Novak otra gran marca absoluta. Será el primer tenista en alcanzar las 400 semanas como número uno. Ocurrirá el próximo lunes, cuando se actualice la clasificación.

Fuente: EFE