La compañía minera de criptomonedas, Argo, y la desarrolladora de tecnología sobre blockchains, DMG, establecieron una alianza para promover la minería digital con energías renovables. Ambas firmaron el denominado Acuerdo Climático de Criptomonedas (CCA) que busca reducir a cero las emisiones contaminantes dentro de la industria.
La iniciativa fue lanzada en abril de este año, pero ambas empresas se unieron al acuerdo hoy viernes 14 de mayo, según se informó a través de un comunicado. Con el CCA nace también el llamado Grupo de Hash Rate Verde, una asociación interna que delineará cuáles serán los objetivos de la organización y los requerimientos que deben cumplir sus miembros.
«El aumento de la demanda por las criptomonedas ha puesto de manifiesto el impacto ecológico que la tecnología basada en blockchains puede tener, y tendrá, en el mundo. Los mineros de Bitcoin (BTC) a escala global representan actualmente hasta un 0,5% del uso global de energía. Existe una oportunidad inmediata y crucial para descarbonizar este creciente uso de energía», resaltaron las compañías en la nota de prensa.
Los miembros del acuerdo climático apuntan a que, para el año 2030, toda la minería de Bitcoin y otras criptomonedas se fundamente en energías renovables. Las empresas consideran que este tipo de propuestas son las que aportarían sostenibilidad a una industria en expansión.
Acciones a seguir y métodos de consenso
Entre las primeras acciones de la organización destacan: desarrollar normas, herramientas y tecnologías para acelerar la adopción y verificar el progreso hacia el 100% de las blockchains con energías renovables. Para los firmantes del CCA el que la industria migre totalmente a fuentes más amigables con el ambiente podría atraer a nuevos usuarios y nuevos capitales de financiamiento.
La organización reconoce que cada proyecto de criptomoneda tiene sus características particulares, especialmente cuando se trata del mecanismo de consenso. Según la CCA es posible que el modelo de Prueba de Participación (PoS) sea más eficiente energéticamente. Sin embargo, hay proyectos basados en Prueba de Trabajo (PoW) que «han llegado para quedarse».
«Para acelerar aún más la minería verde, podemos utilizar la tecnología de código abierto para medir e informar, de forma totalmente anónima, cuánta minería es verde. Existe un fuerte precedente: los sistemas de certificación de energía renovable ya están activos en los mercados de todo el mundo», argumentó la nueva asociación.
La firma del acuerdo por parte de Argo y DMG ocurre justo cuando el ecosistema Bitcoin es señalado de perjudicar el medioambiente. CriptoNoticias informó ayer 13 de mayo que el fabricante de vehículos eléctricos Tesla dejó de aceptar bitcoin como forma de pago porque la minería de BTC utiliza combustibles fósiles.
A pesar de esta afirmación, múltiples estudios han determinado que la mayoría de la actividad minera, en todo el mundo, utiliza fuentes de energías renovables.
Fuente: criptonoticias.com