FUENTE: AFP

Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos, dos aliados dentro de la OPEP, acentuaron este miércoles la presión en la guerra con Rusia con su intención de inundar el mercado de petróleo, cuyo precio volvía a caer.

Arabia Saudita, líder de facto de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) está presionando a Rusia –segundo productor mundial pero que no pertenece a la OPEP– para que acepte una reducción coordinada de la producción mundial para compensar la caída de la demanda por el coronavirus.

Desde que Rusia rechazó el acuerdo la semana pasada, Arabia Saudita anunció la mayor reducción de precios en 20 años para lograr parte de la cuota de mercado del petróleo ruso, desatando una tormenta en los mercados.

Este miércoles la petrolera saudita anunció además que quiere aumentar su capacidad de producción en un millón de barriles diarios, hasta alcanzar los 13 millones.

«Saudi Aramco anuncia que ha recibido una directriz del ministerio de Energía para aumentar su capacidad máxima sostenible de 12 millones de barriles diarios a 13 millones de barriles diarios», dijo la compañía en un comunicado a la bolsa saudita.

El martes el primer exportador mundial de crudo ya decidió aumentar su producción a partir de abril en 2,5 millones, hasta un total de 12,3 millones de barriles diarios, una cifra récord.

Los precios del petróleo sufrieron una caída del 25%, la peor en un solo día desde 1991, pero un día después volvieron a subir, aunque este miércoles, tras el anuncio de Saudi Aramco, volvían al rojo.

«Es esencial un acuerdo»

En Londres el barril de Brent del mar del Norte para entrega en mayo perdió 3,8% a 35,79 dólares.

En Nueva York, el barril de WTI para abril perdió 4% a 32,98 dólares.

Por su parte, Emiratos Árabes Unidos, el cuarto productor de la OPEP y aliado de Riad en el Golfo, también anunció estar dispuesto a aumentar su producción de petróleo en más de un millón de barriles diarios.

«Conforme a nuestra estrategia de crecimiento de la capacidad de producción (….) estamos preparados para abastecer el mercado con cuatro millones de barriles al día» en abril, indicó la petrolera nacional Abu Dhabi National Oil Co. (Adnoc) en un comunicado.

«Por otra parte vamos a acelerar nuestro objetivo de capacidad de cinco millones de barriles al día», indicó la empresa pública, que hasta ahora producía unos tres millones de barriles diarios.

«Los operadores de Emiratos disponen de una capacidad de producción importante que se pondrá en marcha rápidamente teniendo en cuenta las circunstancias actuales», indicó el ministro emiratí de Energía, Suheil Al Mazruei, en Twitter.

Pero su país está «convencido de que un nuevo acuerdo [entre la OPEP y Rusia] es esencial para apoyar un mercado equilibrado y menos volátil», añadió.

Rusia saldrá «mucho más fuerte»

Los anuncios de los sauditas y los emiratíes no parecen afectar a Moscú, al menos de momento, y el presidente ruso Vladimir Putin aseguró el miércoles que confía en que la economía rusa salga «mucho más fuerte».

«Tenemos todas las oportunidades para que los sectores clave de la producción [rusa] salgan de esta situación mucho más fuertes», dijo durante una reunión con inversores, en declaraciones publicadas por la web del Kremlin.

«Estoy seguro de que Rusia cruzará este periodo turbulento con calma y dignidad», añadió.

El martes, el ministro de Energía Alexandre Novak declaró que «no cierra la puerta» a las negociaciones con los países de la OPEP. El acuerdo reciente de Moscú «no significa que en el futuro no podamos cooperar», añadió.

Arabia Saudita tiene decenas de millones de barriles de petróleo en reservas estratégicas que en teoría solo sirven en caso de emergencia y podría usarlas para suministrar más petróleo.