Houseparty es una app para videollamadas que está disfrutando de una gran popularidad debido al confinamiento y a la cuarentena por el coronavirus.
FUENTE: BUSINESS INSIDER
Houseparty es una buena opción para hablar con tus amigos en tiempo de cuarentena, pero también puede ser un incordio para tu privacidad.
La app es una de las aplicaciones más populares en la tienda española de Google Play debido al confinamiento provocado por el coronavirus. Concretamente, la plataforma de videollamadas ha desbancado este mes a pesos pesados como TikTok, Hangouts, Skype o Instagram.
Según datos de Statista, solo en la semana del 15 al 21 de marzo, Houseparty fue descargada hasta 280.000 veces, muy por delante de otra app que también se ha popularizado estos días, Zoom, que se descargó 223.000 veces, o Google Classroom, con 154.000 descargas.
La aplicación es de Epic Games, la editora de videojuegos que goza de una fabulosa popularidad por estar detrás del fenómeno de masas que es Fortnite. Es una de las principales apuestas fuera de la industria de los videojuegos de la que también es desarrolladora del motor gráfico Unreal Engine.
En el momento en el que se escriben estas líneas, la app tiene la versión 1.34.0 disponible en la tienda de aplicaciones de Google, mientras que en la App Store de iOS es la 1.34.1. Su última actualización es de mediados de junio del año pasado, pero no ha sido hasta ahora cuando ha empezado a disfrutar de una nueva juventud.
Aunque de momento muchas de las utilidades que la diferencian de otras apps de videollamadas no han sido localizadas al español, los usuarios explotan sus posibilidades en el contexto de una cuarentena generalizada por la pandemia de COVID-19.
Por ejemplo, la app permite a los usuarios competir con sus amigos en tiempo real a versiones de populares juegos como el Trivial o Pictionary.
Pero su aviso de privacidad, como en todas las aplicaciones, tiene letra pequeña.
Por qué Houseparty puede afectar a tu privacidad… y a la de tus contactos
El funcionamiento de Houseparty es que cuando la abres la app lanza una notificación de que estás «en casa» a todos los amigos que hayas agregado en la plataforma. Automáticamente, la cámara y el micrófono del dispositivo empiezan a funcionar y a grabarte.
Cualquiera de tus amigos puede entrar en tu «sala» e iniciar una conversación contigo.
Esto lo puedes remediar pulsando en el icono del candado que aparece justo en la parte inferior de la pantalla.
Además, la aplicación solicita varios permisos. En su página en Google Play se detalla que la app te pedirá permiso para utilizar la cámara y el micrófono de tu terminal —lo que era de esperar, ni es nada escandaloso— pero también hará uso de tu almacenamiento, tus contactos —lo cual también puede ser lógico— o tu ubicación.
Si compartes tus contactos con la aplicación, esta automáticamente enviará una notificación push a muchos terminales de tus allegados, a fin de advertirles que o estás conectado y disponible para hablar —aunque no lo estés— o te acabas de abrir una cuenta en Houseparty.
La app recopila datos geográficos «anonimizados»
Más allá de los permisos, el aviso de privacidad de Houseparty admite que recopila también datos geográficos de sus usuarios.
«Podemos usar información personal y otra información sobre ti para crear datos anonimizados y agregados, como información geográfica o de localización inidentificable, o información sobre el dispositivo desde el que accedes a la aplicación», advierte el texto legal.
A pesar de que no es extraño que las apps puedan recopilar información anonimizada sobre la localización, un artículo de Forbes incide en que en muchos casos esta información puede dejar de ser «inidentificable» al asociar datos con otros.
Esto cabe resaltarlo en el contexto de crisis del coronavirus: muchos gobiernos, entre ellos el español, están desarrollando apps que permitirán a la Administración pública recabar datos pseudonimizados para tratar de combatir la epidemia. Esto ha puesto en sobreaviso a muchos activistas y expertos en el derecho a la privacidad, que velarán porque después del estado de alarma estos datos o se anonimicen o se destruyan.
La app es segura según un experto, pero así la puedes asegurar todavía más
Lukas Stefanko, analista e investigador en ciberseguridad para ESET, hizo un análisis de la app para este artículo de Forbes. En él, concluía que «los permisos que requiere son necesarios» y «lógicos», y que no había detectado ningún «mal uso» de la app con ellos.
Además, según el experto, «la aplicación no ofrece muchas opciones, lo que significa que son menos los escenarios con los que podrían explotarse problemas de seguridad».
En cualquier caso, se puede activar un «modo privado» para que todas las salas de chat en las que se te incluya se hagan automáticamente privadas. En otras palabras: que nadie podrá acceder a ellas sin invitación.
Para activar este modo es necesario pulsar en la cara sonriente que aparece en la pantalla, en la esquina superior izquierdas. A continuación, se desplegará un menú que permite agregar amigos o ver la lista de amigos. Donde antes estaba la cara sonriente aparecerá una tuerca roja. Pulsando en ese icono, se podrá activar este modo.
Un último truco: al abrir la app, en vez de pulsar en el icono de la misma, mantenlo pulsado. Se abrirá un desplegable —tanto en Android como en iOS— con una opción: Sneak in the house. Se puede traducir como «cuélate en casa»; y permitirá que entres en la plataforma sin enviarle una notificación a tus contactos.
No te creas el bulo que atribuyen a la Policía Nacional
Junto con la popularidad de esta app, también ha recorrido como la pólvora por las redes sociales un presunto tuit de la Policía Nacional que advierte de la necesidad de borrar esta app de los terminales en los que la tengas instalada.
«Usa un algoritmo y al parecer este extrae las contraseñas de las cuentas bancarias«.
La Policía Nacional ha advertido que se trata de un bulo.